Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2010

Toda la verdad y nada más que la verdad

por Javier Debarnot           Muchos sueñan con ser millonarios, otros con ser poderosos, y quizás una porción mínima, simplemente con ser héroes. Yo a decir verdad nunca me acosté deseando nada de eso, pero en mis treinta y cuatro años de vida estuve bastante cerca de cumplir una de esas tres aspiraciones: ser un héroe, pero de los de carne y hueso. ¿O acaso no lo es alguien que le salva la vida a un desconocido sin pretender recompensa alguna?      Me tengo que remontar a un tiempo mucho más lejano, precisamente a épocas en las que empezaba a adormecer la adolescencia pero la adultez se vislumbraba recién a cientos de kilómetros en mi hoja de ruta. Apenas tenía dieciocho años, aún vivía con mis padres y trabajaba como cadete en una pequeña editorial de libros escolares, aunque lo único que importa en la historia es que, luego de finalizar mis labores, volvía en el autobús de la línea 168 un viernes 21 de octubre de 1994 a las cuatro y pico de la tarde.      En un colectivo med